jueves, 4 de octubre de 2012

Reflexiones desde la cueva



La soledad




Soledad: dulce ausencia de miradas* y de ruido, de contaminante ruido que no sólo lastima los oídos, sino aturde el sentido y altera el decurso natural de las relaciones los afectos y los amores; degradante distractor de la atención en lo importante por el escándalo que genera; enervante niebla multiplicadora de la irritante incomunicación de los seres.
La soledad no es un estado del que quisiera escapar sino un espacio vital para rencontrarme, restaurarme y vacunarme de la septicemia contaminante de algunas miradas y decires patógenos, entes mórbidos para el alma.
La soledad está mal valorada porque la confundimos con el estar solos cuando ésta es un tránsito natural del yo al otro. Sin saberlo pretendemos pasar a estar acompañados cuando no soportamos estar consigo mismos. Sin conocimiento pretendemos estar en la mirada del otro cuando no somos capaces de voltear a nosotros mismos.
La soledad es una buena compañera de lo abstracto mientras éste se trueca en lo concreto… es esa dulce ausencia que esta por dar la bienvenida a la tan esperada espera esperanzadora.



*Milan Kundera

19 comentarios:

  1. Dulce soledad...soy amante profundo de tal extraño y amable fenómeno que nos permite reconciliarnos con nosotros mismos y encontrar un momento de paz.

    La soledad es el estado del ser humano que debería ser obligatorio y no temido,a mi en lo personal me encantan los momentos en los que me encuentro con ella y se convierta en mi fiel compañera..saludos!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Yo estoy casado con ella Alan y he aprendido a convivir con ella al grado que me cuesta mucho a veces adaptarme a la compañía ¿Qué paradoja no? Lo luminoso de ella es que me ha enseñado a estar bien conmigo. Esa es una bendición.

      Me alegra que sepas lidiar con ella porque no es tan mala como a veces nos la pintan, Saludos y muchas gracias por el comentario.

      Eliminar
  2. Somos amante de esta chica maravillosa llamada "Soledad", y a veces la engañamos con la nostalgia, con el soñar, con el dolor, con las lágrimas... pobre de nosotros con tantas tentaciones literarias. Saludos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Sí, pese a nuestras abiertas y descaradas infidelidades nos guarda lealtad tan hermosa dama.

      Muchas gracias Alan, agradezco mucho tu visita y tus palabras.

      Eliminar
  3. Esa chica "Soledad", también es mi fiel amiga, mi compañera inseparable, la que sabe todos mis secretos, todas mis tristezas, me siento sumamente a gusto con ella

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Y muchos de esos secretos inconfesables que le confiamos, tenemos la seguridad de que permanecerán así, sin salir a la luz, muy bien resguardados por su bella oscuridad.

      Gracias Alejandra por tu visita y por compartir este enamoramiento perpetuo por tan denostada señorita.

      Saludos desde mi cueva.

      Eliminar
  4. Qué buena reflexión Gonzalo. Me gusta.
    O tal vez no toleramos ver la mierda dentro de nosotros.
    También disfruto de mi soledad, cuando la tengo.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Así es Gildardo, muy agradecido con tu visita.
      Un abrazo.

      Eliminar
  5. Qué hermosa esa soledad, Gonzalo, un abrazo.

    ResponderEliminar
  6. Me parece que muchos de los que escribimos tenemos una gran tendencia a acompañarnos a solas. También ocurre que la vida social de estos tiempos ofrece poca sustancia y mucha egolatría, entonces qué mejor que quedarnos con nosotros mismos y aprender a conocernos más profundamente...
    Me gustó mucho cómo partiste de la frase de Kundera para desarrollar tu propia reflexión.
    Un abrazo, Gonza.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Creo que es muy cierto lo que dices Mirella. Escribir es una buena compañía, a muchos nos viene bien y nos permite llegar a un grado de mayor profundidad en el autoconocimiento que después nos sirve para crear vínculos más fuertes con quienes nos rodean porque nos brindamos a esas personas sin temor o al menos, ya liberados de algunos complejos o prejuicios.
      Sí, cuando pasé por esa frase la subraye y un día que me andaba dando vueltas la cabeza me salió esto de un tirón. De hecho fue cuando abrí el blog.

      Muchas gracias por tu visita, siempre me da alegría leer tus huellas por aquí ¡Te mando un fuerte abrazo!

      Eliminar
  7. Fantástica esa soledad!! Muy buen pensamiento sobre ella. Lo comparto. Gracias. Un saludo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias mi querida Marybel, sí, sin duda una gran compañera.
      Un abrazo.

      Eliminar
  8. He conocido a algunas personas que son incapaces de estar a solas un largo rato, puede ser que no se gusten, que tengan miedo a reflexionar. Los seres creativos necesitan revolcarse en la soledad, al menos en su proceso de de gestación y parto. Un abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Un abrazo María José, concuerdo.
      Gracias por tus huellas.

      Eliminar
  9. Hola ¡Reconozco el tema, esa sensación! La única verdad es que estamos solos, la soledad es eso que estoy respirando, justo ahora, cuando me leo en tus palabras y siento que cada idea me define. No hay nadie que camine por mí, me palpite o haga mi sombra. Estar así, tal como lo has descrito, me sabe a soledad, tiene ese aroma de silencio que nunca está demás... Saludos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Saludos Luna, me alegra mucho saber que te identificas con estas ideas que desde luego en mucha medida me definen. También te agradezco la forma de regarme este comentario: son muy bellas tus palabras.

      Un abrazo.

      Eliminar
  10. Comentarios en Ultraversal

    Mabel Lemos
    Gonzalo, creo que debo confesarme...soy lesbiana. Amo a Soledad por encima de todas las cosas jajajaja. La he pedido en matrimonio varias veces, pero la muy díscola siempre me dice lo mismo: no puedo serte fiel, me debo a otros muchos. Aysss he aprendido a compartirla, qué remedio!!
    Compartido. Un abrazo

    Eva Lucía Armas
    A mí que no me la toooooooooooooquen. Miren como me vengo a enterar de que me pone los cuernos con Mabel Lemus y parece que también con Gonzalo.
    Yo creo que es saber estar con uno mismo y no sentirse "solo". Saber estar, tenerse a uno mismo, con nuestros espacios y nuestras cosas y nuestros modos. Poder ser sin que los demás estén husmeando u opinando sobre nuestros conmigos.
    La soledad es curativa, porque ayuda a la serenidad y a la reflexión y a nuestra propia expansión e ilimitación.
    A pesar de que yo soy un bichito muy sociable, no confundo espacios. La soledad es algo privado e íntimo y la conservo junto a mí, aún en medio de la multitud. No me dejo invadir por "el montón" ni me ataca la desesperación por "un otro". Yo soy mi propio otro. Siempre encuentro qué hacer conmigo misma.

    Gavrí Akhenazi
    Mi soledad, mi compañera muda. La tengo a ella y lo demás me sobra y de verdad me sobra, eso es lo peor. Hago sentir mal a mucha gente con el tema de no querer que me acompañen ni que me invadan ni que me asistan ni que me consuelen.
    Digamos que yo soy un solo nato, así que me identifico plenamente con varios pasajes de esta prosa

    Morgana de Palacios
    Yo no sé si la soledad salva o mata, supongo que las dos cosas, según la personalidad del individuo.
    Hay quien no puede resistir la soledad y hay quien la busca para encontrarse consigo mismo. Ese último es mi caso, pero no porque me sobre todo lo demás, sino porque mi vida interior exige también su espacio.
    Es idiota ser drástico, porque incluso en soledad, necesitamos de la compañía de otros, que no tiene por qué ser física.
    ¿Qué hacemos aquí, sino compartir la vida con sus soledades incluidas a través de la literatura?

    Me ha gustado leerte, Gonzalo Reyes y comparto.
    Namasté.

    ResponderEliminar