domingo, 20 de julio de 2014

El mundo trastocado




En México sufrimos a un boludo.
Desde un foro amarillo con naranja
pretende gobernar el copetudo.
Compró a su rival, formó su granja.

En el distrito existe un pusilánime,
un tibio híbrido camaleónico
que aún montado en un repudio unánime
mantiene su falaz discurso icónico.

En las delegaciones el ladino
mantiene a sus clientelas
con limosnas que cobra como impuesto. *

En las calles no falta el “buen” vecino
robándose los parques y sus telas
¡En estos tiempos locos se premia al deshonesto! **


© Amarante M Matus

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con limosnas que cobra como diezmo
** ¿Cultura del rediezmo?

10 comentarios:

  1. Respuestas
    1. Afortunadamente todavía somos mayoría quienes detestamos la conducta rapaz del político y su emulador en la privatización de lo público aunque tristemente permanecemos indolentes apáticos o sumisos.
      Cuando entendamos que el poder reside en nosotros solidarizándonos y demostrándoles cuan descontentos estamos, es como podremos servir como contrapeso a su poder abusivo.
      No creo sirva de mucho desaparecerlos porque llegarían otros igual o peores. Creo las soluciones pasan por la inteligencia y la solidaridad al servicio de la masa organizada y pensante. Pero mientras la masa sea simple y pura masa, las cosas van a continuar como hasta hoy.
      Gracias por el comentario Alex.

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  2. Resistencia pacifico poética, bien compadre!!!

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    1. Órales compadriux, me late la definición de estas líneas, Hoy fui a correr al lago y es triste ver como so pretexto de la seguridad van cercando el espacio público ¿Qué es lo que sigue? Al rato, nos van a querer cobrara por el acceso a esa zona.

      Saludos y un abrazo.

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  3. Gran soneto Gonzalo. Oportuno y preciso. Comprometido.
    Un abrazo

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  4. Querido amigo Chalo: me encantó tu poema, por comprometido y por certero. Acá pasa igual y ¿acaso en qué parte del mundo no? Quieren privatizarlo todo; esto es una vuelta atrás en el tiempo y muy inútil pero atractiva para los corruptos, claro, los que están en el poder. Los colegios, los centros de salud, todo quieren privatizarlo. Todo absolutamente y ya mismo, privatizarán cada paso que demos, cada palabra, incluso el sol de las placas solares de cada casa que las tiene para ser más ecológicos. Privatizan el sol. Están locos. Ya mismo pretenderán privatizar el aire que respiramos. Todo esto me recuerda a Momo, de Michael Ende. Una pesadilla.
    Muy bueno tu poema. Comparto, con permiso.
    Abrazos, amigo.
    Carol

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    1. Muchas gracias Carol, encantado por el comentario y tu generosidad en él.
      Un beso amiga.

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  5. Buen poema. Acaba uno hasta el gorro de tanto latrocinio y de tanto cinismo. Has mostrado muy bien este hartazgo.
    Un abrazo.

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    1. Gracias María, me alegra tu visita y desde luego el comentario.
      Un abrazo.

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